Scooter eléctrico o silla de ruedas eléctrica: ¿qué conviene más en cada caso?
Una guía clara para ayudarte a decidir con tranquilidad y confianza
La duda más común cuando se busca mejorar la movilidad
Cuando una persona mayor empieza a necesitar ayuda para moverse, es normal que surjan muchas preguntas. Una de las más habituales es ¿Qué le conviene más: una silla de ruedas eléctrica o un scooter eléctrico?
Ambos pueden parecer similares, pero en realidad responden a necesidades distintas.
Este artículo no pretende convencerte de uno u otro, sino ayudarte a ver con claridad cuál puede ser la mejor opción en cada caso.
¿En qué se parecen y en qué se diferencian?
Lo que tienen en común
Ambos son dispositivos eléctricos pensados para facilitar el desplazamiento de personas con movilidad reducida. Se controlan con una mano (generalmente con una palanca o joystick), tienen batería recargable y pueden utilizarse en interiores y exteriores.
Las principales diferencias
El scooter eléctrico se conduce con manillar (tipo motocicleta), suele tener un diseño más abierto y está pensado para personas que todavía pueden caminar distancias cortas o transferirse con facilidad.
La silla de ruedas eléctrica está diseñada para personas con mayor limitación funcional, que necesitan apoyo constante para moverse incluso dentro de casa.
¿Cuándo conviene un scooter eléctrico?
Cuando la persona todavía puede caminar algo
Ideal para quienes pueden levantarse y caminar distancias cortas, pero se cansan con facilidad o tienen miedo a caerse en trayectos largos.Si se busca salir de casa con autonomía
Los scooters son adecuados para paseos, compras o actividades cotidianas en exteriores. Suelen ofrecer mayor velocidad y autonomía que una silla de ruedas eléctrica.Cuando se valora un diseño menos asociado a la dependencia
Muchas personas mayores aceptan mejor el scooter porque lo perciben como un medio de transporte, no como una ayuda técnica.En situaciones donde hay espacio para guardarlo
Los scooters son más voluminosos. Aunque algunos se pliegan o desmontan, conviene contar con un lugar donde almacenarlos con seguridad.
¿Y cuándo conviene una silla de ruedas eléctrica?
Cuando la persona no puede caminar o tiene movilidad muy reducida
En casos de dependencia moderada o severa, una silla eléctrica permite desplazarse sin necesidad de levantarse, incluso dentro del hogar.
Para uso frecuente en interiores
Gracias a su tamaño más compacto y a su capacidad de giro, se adaptan mejor a pasillos, habitaciones y espacios reducidos.
Cuando hay dificultades para manejar un manillar
El control mediante joystick es más sencillo para quienes tienen poca fuerza o problemas en las manos.
Si se requiere un apoyo postural específico
Algunos modelos ofrecen respaldo reclinable, reposapiés ajustables y sistemas de posicionamiento que mejoran el confort y la salud postural.
¿Y si no está claro todavía?
Es normal tener dudas, especialmente cuando la persona está en una situación intermedia.
En estos casos, conviene valorar lo siguiente:
- ¿Para qué se va a usar principalmente: paseos, casa, ambos?
- ¿La persona puede caminar o transferirse con algo de ayuda?
- ¿Qué tipo de control puede manejar mejor?
- ¿Dónde se va a guardar el dispositivo?
También puede ser muy útil consultar con profesionales como fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales o personal sanitario que conozcan la situación personal.
¿Quieres ver modelos recomendados?
En SomosAbuelos.com hemos reunido una selección de dispositivos pensados para mejorar la movilidad de personas mayores, tanto scooters eléctricos como sillas de ruedas eléctricas. Puedes explorarlos aquí:
- Ver scooters eléctricos para mayores
- Ver sillas de ruedas eléctricas
Nota: Los productos y recursos mencionados en esta página son una ayuda complementaria y no sustituyen el consejo profesional. Siempre recomendamos consultar con el personal sanitario o de atención social en caso de duda.